viernes, 19 de junio de 2009 | By: Cafeína

Revisando lo leído

Los días pasan con poco sol y mucho trabajo, así que el fin de semana está hecho para descansar. Como el mal tiempo no ayuda, lo mejor es encerrarse en un cine y devorar. En estas últimas semanas he visto 3 adaptaciones de novelas en el cine: Twilight (Crepúsculo), Angels & Demons (Ángeles y Demonios y Män Som Hatar Kvinnor (Los Hombres Que No Amaban A Las Mujeres, extrañamente traducida al ingés como The Girl With the Dragon Tatoo).

No pienso detenerme en la superproducción americana llamada Ángeles y Demonios porque considero que El Código Da Vinci ya lo dijo todo. Con esto me refiero a que sabían de manera aproximada cuál iba a ser el box office y echaron toda la carne en el asador en cuanto a efectos especiales se refiere. Más Tom Hanks (¿cuándo demonios va a retirarse este hombre?) y algo de polémica, dos cosas que siempre preceden este tipo de mega producciones americanas.

Y llegamos a Twilight. Confieso que me estoy leyendo los 4 libros a una velocidad de vértigo (ya sabéis que los vampiros son una de mis debilidades) y que hice algo inaudito en mi: vi primero la peli y leí después el libro. El día que la vi fue uno de esos días tontos que "necesitas" este tipo de película ¡y me encantó! Fue el celuloide quien me hizo pasar al papel y ¡qué decepción! Me pareció una adaptación pésima de la novela ll
ena de caras bonitas y de importantes saltos en la trama. La segunda parte New Moon, no me cogerá tan desprevenida.
Sin embargo, esa misma semana me adentré en la versión cinematográfica sueca de Los Hombres... ¡y me pareció muy buena! Es cierto que también hay algunos saltos, quizá no sean los detalles más importantes del libro, pero lo que más me gustó fue Lisbeth Salander. Cuando lees un libro, los personajes van tomando forma en tu imaginación y la Lisbeth Salander que se formó en mi cabeza parecía imposible de llevar a la realidad. La actriz Noomi Rapace lo ha conseguido. Con una (parece ser) preparación titánica para dar forma al controvertido personaje, consigue una Lisbeth (y las crudas escenas que la rodean) muy similar a la que describe el libro: oscura, vengativa y con un pasado que se desvelará en la segunda parte de Millenium.

Cuando voy al cine a ver la adaptación del libro me gusta que lo que veo se parezca a lo que imaginé, como leer una segunda vez. Sin embargo, cuando voy a un concierto me gusta que la música no sea igual a la del CD, me gusta que el artista me dé otra versión de lo mimo.
Y vosotros ¿qué esperáis cuando vais a ver al cine la adaptación del libro? ¿Una segunda versión o una segunda leída?